A la hora de diseñar un plan de compensación para los empleados, muchas empresas se enfrentan a una difícil decisión: ¿apostar por beneficios sociales financiados por la compañía o permitir que los trabajadores gestionen parte de su salario mediante la retribución flexible? Cada opción tiene sus ventajas, pero no siempre es fácil determinar cuál se adapta mejor a las necesidades del equipo y los objetivos de la empresa.
Si te encuentras en esta situación, el modelo mixto puede ser la solución ideal. Esta estrategia combina lo mejor de ambos mundos, permitiendo que la empresa subsidie ciertos beneficios esenciales mientras ofrece a los empleados la posibilidad de complementar su compensación con ventajas fiscales. De esta manera, se crea un sistema más equitativo, flexible y atractivo que beneficia a todas las partes.
El modelo mixto es un sistema de compensación integral que combina dos elementos esenciales: los beneficios sociales en subvención y la retribución flexible.
Se basa en un enfoque flexible que permite a los trabajadores adaptar su paquete de compensación según sus necesidades personales, mientras que la empresa puede fortalecer su propuesta de valor y mejorar su atractivo en el mercado laboral ofreciendo también una compensación extrasalarial.
Como ya mencionamos, el modelo mixto funciona combinando retribución flexible y beneficios sociales en subvención para optimizar la compensación de los empleados. Con la retribución flexible los trabajadores destinan parte de su salario bruto a productos y servicios (con todos los limites previstos). Estos importes son exentos de IRPF, lo que aumenta el poder adquisitivo del empleado sin generar un coste adicional para la empresa. Estos servicios pueden ser gestionados por la empresa a través de plataformas como Edenred Flex.
Por otro lado, los beneficios sociales en subvención son prestaciones financiadas íntegramente por la empresa por encima del salario base. Estos beneficios pueden incluir servicios como ticket comida, ticket transporte, guardería y más. Lo que la diferencia de la retribución flexible es que la empresa asume todo el coste del servicio, mientras que la retribución flexible está dentro del salario base y por tanto los costes son asumidos por los empleados.
En resumen, con el modelo mixto, la empresa da a sus trabajadores la posibilidad de utilizar parte de su salario para una retribución flexible en los servicios que prefieran. Además, añade una cantidad extra a su sueldo para que los empleados puedan gastarla en los mismos servicios o en otros distintos.
Al día de hoy los profesionales buscan no solo una buena remuneración económica, sino también un paquete de beneficios que les brinde seguridad, flexibilidad y una mejor calidad de vida. En este contexto, el modelo mixto se posiciona como una solución innovadora que aporta ventajas tanto a las empresas como a los empleados.
Algunas de las opciones de Edenred que pueden integrarse en este modelo son:
El modelo mixto se presenta como una solución innovadora y equilibrada para la compensación laboral. Implementar este modelo no solo fortalece la relación entre empresa y empleado, sino que también contribuye a un entorno laboral más competitivo y sostenible.
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